La harina de almendra es una fantástica alternativa sin gluten, paleo, baja en carbohidratos y apta para la dieta cetogénica, en lugar de la harina de trigo tradicional, que está ganando popularidad como ingrediente básico en muchas cocinas. Afortunadamente, hacer este ingrediente saludable en casa es muy sencillo, y nuestra receta paso a paso te lo demostrará.
¿Qué es la harina de almendra?
La harina de almendra se elabora moliendo almendras y es perfecta para las personas que son intolerantes al gluten y buscan una alternativa a la harina de trigo. El proceso de elaboración de la harina de almendra implica escaldar las almendras, quitarles la piel y molerlas hasta obtener una harina fina. También es una opción ideal para quienes buscan un ingrediente bajo en carbohidratos o adecuado para la dieta cetogénica.
Harina de almendra casera: Material
Preparar harina de almendra es fácil y sólo requiere dos ingredientes. Necesitarás una bolsa de almendras crudas y un procesador de alimentos o batidora de alta velocidad. También puedes utilizar un molinillo de café, pero esto llevará más tiempo y dará como resultado una harina ligeramente más gruesa.
Receta paso a paso
Paso 1
Comienza simplemente añadiendo un puñado de almendras crudas en el procesador de alimentos o batidora de alta velocidad. Dependiendo del tamaño de tu máquina, puede que tengas que trabajar por tandas. Pero recuerda que cuanto más pequeña sea la tanda, más fácil será conseguir una harina fina.
Paso 2
Pulsa las almendras en intervalos de 10-20 segundos hasta que consigas la textura deseada. Las almendras pasan por varias fases a lo largo del proceso. Primero, se trocean en trozos pequeños, luego empiezan a pegarse y se convierten en una pasta, y finalmente se convierten en una harina fina.
Paso 3
Si tu máquina tiene un accesorio procesador de alimentos, puedes utilizar el disco de rallar como paso final para conseguir un resultado aún más fino. De lo contrario, podrías utilizar un colador para tamizar la harina y eliminar cualquier trozo grande.
Paso 4
Una vez que estés satisfecho con la textura, ya estará lista para usar. Guarda la harina de almendra casera en un recipiente hermético en el frigorífico durante un mes, o en el congelador durante seis meses.
Qué hacer con la harina de almendra
La harina de almendra casera se puede utilizar igual que la harina de trigo tradicional en diversas recetas. Puedes añadirla a tus productos horneados favoritos, como pan, magdalenas, tortitas y galletas. También se puede utilizar como aglutinante para las albóndigas, en las costras de las quiches y tartas, y como rebozado para el pollo o pescado.
Conclusión
Hacer harina de almendra en casa es un proceso fácil que sólo requiere dos ingredientes y un procesador de alimentos o batidora de alta velocidad. Con harina de almendra casera, puedes preparar innumerables recetas deliciosas y saludables sin gluten, paleo, bajas en carbohidratos y aptas para la dieta cetogénica. Así que no esperes más: prueba esta receta y disfruta de las ventajas de la harina de almendra recién hecha.